Escultura con la palabra "Love" de Tom's Drag

La Colección Drag de Tom: ingenio, encanto, excentricidad y una exuberante alegría de vivir. Lejos de las convenciones y el conservadurismo, las obras de Thomas Hoffmann son un verdadero enriquecimiento para quienes aprecian lo extraordinario. Su legado perdura en sus "Drags", como él mismo llamaba a sus excéntricas esculturas. Sus peculiares objetos gozan de reconocimiento internacional. "Cada día, la vida nos depara experiencias coloridas, pero también extravagantes, en todas sus facetas", dijo el artista Thomas A. (Tom) Hoffmann. El propio artista pop aportó algunas de estas facetas: sus vibrantes muebles y esculturas de luz sorprenden con ingeniosos detalles. Por ejemplo, el espejo luce una corona para que uno se sienta como un rey o una princesa a diario. Las cómodas tienen elegantes patas, ¡literalmente! Y cualquiera que haya visto el ramo de tulipanes de Tom brillando a la luz de las velas encontrará la espera de la primavera mucho más llevadera. Con sus caprichosas esculturas de animales, Tom estiliza a urbanitas modernos que son quienes son, y a quienes no les importan las tendencias ni las modas pasajeras. Las diseñó como figuras de animales ingeniosamente coloridas. Todo comenzó con regalos navideños hechos a mano que el artista concebía y ensamblaba en su estudio: muebles y esculturas originales y meticulosamente detallados en los que plasmaba su pasión por la generación hippie. Ahora, sus excéntricos "drags" se han convertido en una respetable colección de objetos individuales, ingeniosos y a menudo provocativos, que comparten una característica: rompen con las rígidas normas cotidianas y contagian alegría. En los estudios de Tom's Company se siguen creando objetos de diseño únicos y distintivos que enriquecen cualquier espacio con sus vibrantes toques de color y su diversidad casi inagotable.