Escultura dorada "Diosa protectora Isis", réplica de museo hecha de hierro fundido y madera

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Escultura “Diosa protectora Isis” (tamaño original), dorada

«Soy todo lo que fue, todo lo que es y todo lo que será…» Así describe una inscripción en una de sus incontables estatuas al «reino mágico» y a la «diosa de los 10 000 nombres». Para los egipcios, era ante todo una diosa madre, mujer y del parto. Se la consideraba la madre de los dioses y la protectora del faraón reinante.

Esta figura era una de las cuatro diosas guardianas que custodiaban el santuario que contenía las entrañas de la momia de Tutankamón. Las diosas tenían la misión de proteger al faraón en el más allá y alejarlo del peligro. El santuario con las diosas fue descubierto en una habitación contigua a la cámara funeraria. Egipto, XVIII Dinastía, hacia 1335 a. C.

Original: Museo Egipcio

Altura total 96,5 cm