Los historiadores del arte suelen definir el período teórico de consideración de manera algo diferente, pero, desde un punto de vista puramente lógico, la prehistoria y la historia temprana del arte comienzan con el comienzo del arte, con la primera obra de arte creada por un ser humano.

Puesto que al arte y a la cultura se les asigna un papel crucial en el proceso de desarrollo humano, también se podría decir que el hombre se humanizó a través de esta primera obra de arte.
Este problema del huevo y la gallina prácticamente no plantea problemas para los historiadores del arte, porque la primera obra de arte creada por humanos que ha sobrevivido hasta la posteridad fue creada "solo" hace unos 40.000 años.
La prehistoria y los inicios de la historia del arte dan paso a la historia del arte de la Antigüedad con el desarrollo de las primeras civilizaciones avanzadas, alrededor del 3100 a. C. en términos de la historia mundial. Nuestros antepasados llegaron un poco después.
Los seres que habitaban cuevas o cabañas de madera en nuestra región y más al norte tenían tan poco que ver con la alta cultura que, durante los conflictos con los romanos unos siglos después de Cristo, todavía “absorbían cultura auténtica” (algo con lo que un romano perspicaz ya no habría estado de acuerdo, puesto que la cultura romana ya era bastante decadente en aquel momento).











